Este jueves, en el encuentro convocado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), el presidente Luis Arce adelantó que la escasez de combustible persistirá si es que no se aprueban los proyectos de financiamiento externo.
En su criterio, la situación será más peligrosa más adelante, pues la falta de carburantes podría entorpecer las elecciones del próximo 17 de agosto.
“Si no tenemos eso garantizado, es muy probable que en el muy corto plazo vayamos a tener nuevamente problemas de combustibles y eso va a entorpecer el desarrollo de las campañas electorales y va a interrumpir el ánimo de la población con respecto al proceso electoral”, advirtió.
De acuerdo con el Presidente, el país, para esta gestión, deberá destinar aproximadamente $us 2.000 millones para la importación de diésel y gasolina, monto que es cada vez más difícil de acceder si la Asamblea Legislativa no aprueba los créditos.
El encuentro de este jueves, en el que participan representantes de todos los órganos del Estado y de las principales fuerzas políticas, tiene como objetivo garantizar la realización de las elecciones ante un escenario de conflictividad e incertidumbre.
